Vamos a compartir 5 pasos clave para construir una identidad visual que transmita los valores de tu empresa, su propósito y su personalidad.
Cuando hablamos de identidad visual, nos referimos a todos los elementos que le sirven a tu empresa para mostrarse. Algunos los llaman “touchpoints”, otros “activos de marca”. Son todos los lugares donde se puede representar visualmente. Los puntos de contacto de tu marca con tus clientes.
Desarrollar una identidad visual para construir una marca poderosa no sólo es cuestión de estética. Los mensajes en los textos y fotografías, apelando a emociones, también crean la identidad.
El diseño es el embajador silencioso de tu marca.
Paul Rand
Piensa en el diseño como un embajador que te presenta ante otros. Alguien que podría decir: “Hey! Mira nuestra marca!” o bien“Buenos días. Tengo el agrado de presentarle de nuestra marca”.
Ese diseño puede hablar de nuestra personalidad, nuestros valores y hasta nuestra historia. Lo hace en silencio, con lo que se ve.
Estos son los 5 pasos que aconsejamos para que la identidad visual de tu marca le cuente a todos cómo es y por qué tienen que ser sus clientes.
Paso 1: Investiga
Investiga a tu público objetivo. Conocerlo es una obligación para crear tu identidad. ¿Cuáles son sus gustos, motivaciones y preocupaciones? ¿Con qué otras marcas interactúan?
Algunos se largan a diseñar sin pensar que las marcas conviven con otras en el mercado.
Tengas un local de ropa, un restaurant o des servicios a empresas, busca en internet cómo se muestran tus competidores. Toma nota de los elementos en común. Por ejemplo, colores, estilos de tipografía, formas en sus logos, su tono de comunicación, etc.
Cuando sabes quiénes son tus clientes y con quién compartes el mercado, es hora de pensar en tu propia empresa, su personalidad y propósito.
Paso 2: Define tu propuesta
Escribe 4 o 5 palabras que describan la personalidad de tu empresa como si fuera una persona.
¿Cómo sería esa persona?
¿Qué relación tendría con sus clientes?
¿Qué cosas NO sería?
¿Por qué es diferente a las demás?
¿Qué quieres que sientan al verte?
Para algunas Startups que proponen nuevos canales de venta o nuevas soluciones a problemas, la competencia no es otra empresa, sino la vieja forma de resolver el problema. Reflejar lo que las diferencia en su identidad visual suma puntos extra.
¿Tú o tu marca tienen una historia para contar? Puedes encontrar tu diferencial en esa historia. La gente ama las historias. Si puedes apelar a alguna emoción y conmover en el proceso, mejor.
Paso 3: Trabaja en tu logo
El logotipo es el punto de partida de tu identidad visual. Es la “cara” de tu negocio. Al diseñar o rediseñar tu logotipo el mejor resultado siempre vendrá de la mano de un experto.
No hay nada que estimule más la creatividad de un diseñador que un lápiz y una hoja en blanco. En este paso, se prueban símbolos, objetos y formas. Diferentes maneras de mostrar el nombre, con variantes de disposición y estilos, que representen lo que queremos transmitir.

El diseño de un logo es el resultado de un objetivo de comunicación. Busca comunicar el propósito de manera simple y fácil de recordar.
La tipografía es parte de ese diseño “embajador”. Manuscrita puede dar un look informal. Letras en imprenta mayúscula, modernidad. Letras gruesas, una personalidad osada y fuerte. Estilos vintage pueden remitir a algo más artesanal, o de larga trayectoria. La tipografía puede transmitir una imagen corporativa o algo más informal.
Recomendamos elegir también una tipografía para los textos del website, tarjetas comerciales, brochures institucionales o flyers, posts en redes sociales, cartelería, señalética, publicidad, etc.
Para los colores, recurrimos a la psicología. Los colores están asociados a atributos o emociones. No se trata de elegir el que te gusta, sino qué significa para tu público. También podemos recordar lo investigado en el primer paso. ¿Había colores comunes entre las marcas del sector?
Los colores también estarán en todos los activos de tu marca. Elige una paleta para usar en el website, brochures, posts, etc.
Paso 4: Composición
Acompañando al logotipo, en toda comunicación digital o impresa vas a usar imágenes, fotos o gráficos. Estas imágenes y gráficos van a variar en todos tus diseños, por eso es importante definir un estilo de fotografía y gráficos, para que toda tu comunicación se vea y se sienta propia de tu marca.
¿Fotos a color o blanco y negro? ¿Tendrán personas o no? ¿Las personas tendrán una actitud específica? ¿En qué lugares, iluminación, colores? También se pueden usar texturas y tramas con formas o dibujos según la personalidad de la marca.
La disposición de los elementos en el diseño (el layout) también es parte de la identidad visual. Al ubicar los elementos de tu comunicación en determinado lugar, con determinado tamaño, también estás creando tu identidad.

Paso 5: Comparte tu mensaje
Si sabes cómo es tu empresa, a quién le hablas, qué les ofreces, y qué quieres que sientan, dilo. De la forma más natural, como lo diría ese “embajador” que presenta tu marca.
La personalidad de una marca se refleja en sus palabras. No tengas miedo de hablar diferente. Eso es lo más valioso: la diferenciación. Si todos dijeran lo mismo, qué aburrido sería el mercado.
Sean cortos, largos, divertidos, serios, irónicos, técnicos o emotivos, tus textos también crean imágenes visuales en la mente de las personas.
Todos los negocios tienen un nombre. Casi todos tienen un logo. Pero pocos logran construir una marca.
Diseña estratégicamente tu identidad visual, para diferenciarte y destacarte. Sigue estos pasos y comunica de forma coherente con ellos. Es la clave para transmitir la personalidad de tu marca a tus clientes.